Cuando un camino bien transitado vence al olvido
- Domingo, 21 de Abril de 2019 | Locales

Hay decenas de frases hechas dando vueltas, una de ellas es la que se refiere a que las personas que se recuerdan nunca mueren. Osvaldo hace un año –¡un año ya!– que murió y no está presente físicamente, lo que hace que se lo extrañe. Lo que es cierto es que quien traza un buen camino no derrota a la invencible muerte, sino al olvido, lo que no es poco.
Casi no hay día en el que en la redacción de De Hoy ante un suceso local o alguna declaración polémica, no se diga ¿te imaginás a Osvaldo si viera esto?, ¿qué diría Osvaldo si hubiera escuchado a este tipo?
Desde mi primer día de trabajo, allá por julio de 1997, y hasta hoy trabajé con la mayor libertad. Osvaldo jamás me presionó ni condicionó mi trabajo. No son poco los que piensan que éramos simples amanuenses que nos limitábamos a transcribir sus opiniones. Eso, más que a los periodistas, es subestimar al propio Osvaldo.
Del mismo modo, aquellos que creen que ideaba operaciones políticas contra tal o cual deberían saber que jamás ocuparon siquiera un segundo de sus pensamientos.
En mi caso, coincidíamos en las pocas pulgas, el rechazo a quienes suponen que hablar mucho y en difícil los hace de una inteligencia superior, y lo más importante: Boca Juniors, aunque diferíamos en la opinión sobre Riquelme (que en la última época no le gustaba).
Como Pablo Pastore dijo, cuando se descubrió la placa con la que el Círculo de Periodistas lo homenajeó el 7 de junio del año pasado, en este diario "permanecen vivos su humor no exento de ironía, sus enojos cuando algo no salía como esperaba y también su disposición hacia quien llegaba en busca de una ayuda o de un consejo. También sigue aquí presente, el entusiasmo que lo acompañó hasta el último día".
Pablo también se refirió a que De Hoy –la gran creación de Osvaldo–, "ha sido un valioso aporte en el camino y la construcción de un periodismo mejor y más libre para Chacabuco, Un periodismo que sea parte de una sociedad mejor que sea más libre y más justa".
Y es así. Todo está presente y es, como su trayectoria en su profesión y en la política, la mejor arma para vencer al olvido.
Eduardo N. Carboni